Sobre el plan
Plazaola – Sakana – Ultzamaldea: un destino que avanza hacia la accesibilidad
El Plan de Accesibilidad del destino Plazaola-Sakana-Ultzamaldea nace con una idea clara: abrir caminos para todas las personas. Aquí, entre montañas, vías verdes y pueblos con alma, hemos entendido que el turismo solo es completo cuando nadie queda fuera.
Este plan recoge la fuerza de nuestra historia, la identidad euskaldun y la belleza natural del territorio, y las une con un objetivo compartido: ser un destino accesible y sostenible. Queremos que quienes nos visiten sientan que aquí todo está pensado para disfrutar sin barreras.
No se trata solo de rampas o señalética, sino de una forma de mirar el mundo. Es una invitación a descubrir, pedalear, caminar y saborear nuestra tierra con igualdad.
Plazaola, Sakana y Ultzamaldea se ponen en marcha para que el viaje, desde el inicio hasta el regreso a casa, sea una experiencia sin límites.
Tu implicación
Este plan no puede caminar solo: necesita la implicación de todas y todos.
Los agentes del sector turístico, las instituciones, las empresas locales y la ciudadanía jugamos un papel decisivo.
Porque un destino accesible no se construye desde los despachos, sino desde el compromiso compartido. Hace falta escuchar a quienes más saben: las personas con diversidad funcional y sus asociaciones. Hace falta también que los negocios locales se animen a dar un paso adelante, adaptando espacios, aprendiendo y colaborando.
La accesibilidad no es una obligación fría, es una oportunidad cálida de abrir las puertas a más visitantes.
Y sobre todo, es un ejercicio de empatía: ponernos en el lugar del otro y diseñar experiencias sin barreras.
¿Qué beneficios obtenemos?
Cuando un territorio se convierte en accesible, ganamos todas y todos. Se abren nuevas oportunidades para el turismo, se fortalece la economía local y se genera empleo.
Los comercios y alojamientos descubren un público fiel que valora el trato inclusivo. Los pueblos pequeños mantienen servicios y vida gracias a personas visitantes que llegan y repiten.
Pero más allá de la economía, hay un beneficio mayor: el orgullo de ser un territorio referente en igualdad e inclusión.
Hacer accesible Plazaola-Sakana-Ultzamaldea no es solo una acción técnica, es sembrar futuro. Es crear una cadena de accesibilidad que garantice experiencias seguras, cómodas y autónomas para cualquiera.
En definitiva, es construir un modelo de turismo que refleja lo que somos: un pueblo abierto, acogedor y sin fronteras invisibles.
